Un Pump Track es un circuito que se puede recorrer completamente en bicicleta sin la
necesidad de dar pedales, impulsándose únicamente por la inercia adquirida
en los saltos y peraltes del circuito y la propia habilidad del ciclista.
A diferencia de los circuitos Dirt Jump, con grandes saltos
que implican riesgo y exigen experiencia, un circuito Pump Track puede ser
recorrido por ciclistas de cualquier nivel sin correr grandes riesgos. Además un circuito de estas características transmite
gran diversión y supone el lugar ideal para entrenar la técnica de pilotaje.
Por lo tanto una instalación de este tipo, pionera en
nuestro entorno, es perfecta como escuela para que los más pequeños aprendan a
manejar la bicicleta y también para que los más expertos entrenen su pilotaje,
convirtiéndose en punto de encuentro para aficionados a la bicicleta.
Beneficios de practicar en un Pump Track:
Te enseña cómo usar el terreno para ganar
velocidad.
Aprendes a pasar mesetas y mejoras en las
curvas.
Aprendes a ganar velocidad con la inercia de tu
cuerpo.
Aprendes a mirar varios metros por delante de tu
bicicleta.
Aprendes a leer el terreno y elegir el mejor
camino.
Exige un intenso ejercicio físico de todo el
cuerpo en un corto periodo de tiempo.
Es un lugar ideal para desarrollar la
coordinación, el equilibrio y las reacciones rápidas.
Es muy divertido.
Y qué aporta:
Si estás empezando, aprenderás a manejar tu bicicleta, adquiriendo una excelente base para comenzar a salir a la montaña.
Si ya tienes experiencia, mejorarás enormemente tu técnica y ganarás gran seguridad en tus rutas de mtb.
Si eres un experto, te servirá como un excelente entrenamiento físico y de técnica, haciéndote mejorar.
La construcción del Pump Track se ha llevado a cabo durante la primera quincena de Noviembre, pero tendremos que esperar a que todo el parque esté finalizado para poder disfrutarlo. En este tiempo la empresa Aldapa, encargada de la ejecución del proyecto, tendrá tiempo para terminar los detalles de la construcción del circuito.