En esta travesía hemos recorrido algunos de estos caminos en pleno otoño con los arboles desnudos y todas sus hojas cubriendo el suelo. Situación que dificulta el tránsito en bicicleta pero que aporta también un ambiente muy atractivo.
Algunos socios y amigos del club completamos el grupo para realizar esta travesía en mtb que nos llevó desde las montañas de Goizueta al pueblo de Oiartzun, un recorrido no muy largo pero bastante exigente de más de 5 horas de ruta.
BICIS EN ARTIKUTZA
Artikutza es una finca propiedad del Ayuntamiento de
Donostia-San Sebastián y ubicada en el término municipal de Goizueta, en
Navarra. El ayuntamiento de San Sebastián la compró a sus dueños en 1919 con la
intención de abastecer la ciudad con el aprovechamiento de sus aguas, para lo
que construyó una amplia red de tuberías y canales. Entre 1950 y 1960 se construye
la presa del embalse con este mismo fin. Durante su larga historia, la finca ha
sido protegida para garantizar la calidad de sus aguas por lo que han estado
prohibidas todo tipo de actividades de explotación forestal, minera o ganadera
y ha sido limitado también el acceso de personas.
Esta circunstancia ha hecho de Artikutza un lugar con un
entorno natural realmente valioso y apenas interferido a lo largo de casi un
siglo. Un verdadero pulmón que en los últimos años está abriendo sus puertas
para que el visitante pueda disfrutarlo pero con la enorme responsabilidad de
conservar y proteger algo tan valioso.
Dentro de los muchos visitantes de Artikutza, los ciclistas
de montaña encontramos en la finca un enorme atractivo que por encima de su
sobresaliente entorno natural formado por bosques, ríos y montañas, añade un
gran interés para practicar nuestro deporte. La propia historia de Artikutza ha
dejado un valioso patrimonio en forma de caminos tradicionales que han llegado
hasta nuestros tiempos y no debemos perder.
En el siglo XIII la Colegiata de Santa María de Roncesvalles
ya comenzó a explotar los recursos de la finca con sus ferrerías, el
aprovechamiento forestal con la
producción de carbón vegetal, la extracción de minerales y los pastos para el
ganado. Las desamortizaciones de los bienes eclesiásticos, que comienzan en el
siglo XIX, harán que diferentes dueños, a partir de 1844, sigan explotando la
finca, buscando siempre un beneficio económico. Para ello se construyeron
diferentes líneas de ferrocarril que servían para extraer y transportar el
mineral hacia la costa y poder comerciar con él.
Es fácil imaginar que toda esta actividad nos ha dejado una
generosa red de caminos que ahora podemos usar para adentrarnos en sus bosques
y subir sus montañas. Un patrimonio que no debemos perder y tenemos la responsabilidad de
conservar. Hoy esto es una realidad en
parte gracias a un excelente trabajo de mantenimiento sobre los caminos por
parte del ayuntamiento, pero también, y a partir de ahora con mas importancia,
por un uso responsable por parte de los visitantes.
Si bien los ciclistas llevamos muchos años por los caminos
de las montañas debemos ganar nuestro acceso a los lugares más sensibles y
protegidos con una actitud de extremado respeto a la naturaleza y al resto de
usuarios. El sentido común y la experiencia en la montaña dejan claro que la
convivencia ha sido posible. Lejos de la actitud competitiva, nuestro tránsito
por los caminos señalizados debe asegurar el acceso a este paraje histórico en
los años venideros.